En el mundo del interiorismo, cada proyecto es una oportunidad para crear un espacio único que refleje la personalidad y el estilo de sus habitantes. En este ático, los talentosos diseñadores de Brakara Studio han optado por una estética retro, inyectando vida y color a cada rincón con una mezcla vibrante de elementos y materiales.
La clave de este diseño radica en la armonía entre los diferentes elementos, combinados de manera sutil para lograr un resultado final impactante. Desde el principio, el equipo de Brakara Studio tuvo en mente la apertura de todas las estancias, derribando paredes para crear un ambiente amplio y fluido. Sin embargo, en un gesto de respeto hacia la historia del lugar, decidieron conservar pequeños detalles del estado original de la vivienda, como el pavimento de terrazo y las marcas de las rozas para las instalaciones, que añaden carácter y autenticidad al espacio.
El baño, como núcleo principal de la vivienda, ha sido diseñado con especial atención al detalle. Dividido en dos espacios distintos pero perfectamente integrados, este baño combina funcionalidad con estilo de una manera excepcional. Una zona abierta, con el lavabo Nilo de Bathco y la ducha, se fusiona de forma armoniosa con el salón, gracias a una elegante mampara de hierro y cristal. Esta integración crea una sensación de amplitud y fluidez en todo el espacio.
La zona más privada del baño se encuentra en una habitación contigua, separada por una puerta corredera hecha a medida con cristal estriado. En su interior, el revestimiento de color rosa intenso crea un ambiente acogedor y lleno de personalidad, contrastando con las paredes blancas que lo rodean y el lavabo mini New Bérgamo de Bathco. Esta combinación de colores y texturas añade un toque de calidez y sofisticación al baño, convirtiéndolo en un verdadero refugio de estilo retro.
Este ático es un homenaje al encanto retro, donde la apertura de espacios y la combinación de materiales crean un ambiente único y lleno de vida.
Interiorismo: Brákara Studio (@brakarastudio)
