El estudio Noé Prades nos enseña este proyecto de rehabilitación y reforma integral que nace en un edifico modernista del 1900 típico de la arquitectura de la ciudad de Barcelona.
El propio interiorista explica el concepto de la reforma que ha tenido el objetivo de “transmitir el equilibrio de la naturaleza y sus colores como el azul símbolo del agua, o el verde símbolo de la flora y la fauna que llenan de vida cada espacio invitando a la calma y al bienestar. Con un sutil carácter tropical y mid/century, hemos utilizado materiales nobles como la madera o acabados como el cannage siguiendo un hilo conductor en todo el espacio. Reforzándolo con formas curvas hemos conseguido un carácter de toques femeninos y desenfadados en todo el apartamento”.
La reforma incluyó tanto la apertura de nuevos espacios y nueva distribución como el diseño de la carpintería y de mobiliario. La mesa de comedor VOLÀ y el mueble de la sala ARCO son algunos ejemplos.
El interior dispone de 76m2 distribuidos en dos habitaciones dobles y dos baños completos junto a una cocina que se ha abierto al salón comedor creando un espacio diáfano y luminoso que gira alrededor de dos ventanales que dan acceso a la terraza.
Nada más entrar se encuentra un recibidor junto a un pasillo que es coronado por tres grandes puertas de doble hoja en acabado de madera de roble dándole la fuerza y personalidad a cada estancia invitando a descubrir más allá.
HABITACIÓN PRINCIPAL
En la primera puerta encontramos la habitación secundaria. Esta habitación ha sido diseñada a través de un elemento principal: su cabezal. Panelado con un papel de motivos tropicales de la firma Ananbó, oculta un gran armario trasero permitiendo que el resto del espacio quede libre invitando a la contemplación de las formas y colores que lo componen.
BAÑO PRINCIPAL
En la segunda puerta recorriendo el pasillo, descubrimos el baño principal. El color agua inunda este espacio llenándolo de vida. “Hemos utilizado un pavimento hidráulico para las paredes y el suelo creando una geometría desordenada e informal. Elementos como el espejo de mimbre estiran las texturas y las sensaciones del resto de la vivienda”.
HABITACIÓN SUITE
En la tercera puerta se encuentra la habitación suite en la que “como si de un oasis se tratara hemos recubierto toda la pared del cabezal con un muro de la firma Ananbó creando este contraste entre el cannage y los armarios fabricados a medida con formas depuradas simbolizando los árboles”.
La habitación da acceso al baño en suite. En este baño “se nos pedía darle un carácter más femenino y cómo no, los colores rosados han inundado este espacio. Retomando la influencia mid-century hemos diseñado estos espejos divididos por un aplique central de la firma Nnura reforzando las formas curvas. Los suelos y las paredes se han revestido hasta media altura por hidráulicos de colores rosados con formas curvas y desenfadadas”. Ahí se colocaron dos lavabos Trieste de Solid Surface de Bathco.
COCINA-SALÓN-COMEDOR
En la última parte del apartamento se puede ver la cocina abierta al salón comedor. Esta cocina ha sido diseñada a medida utilizando los colores verdes resaltando los tiradores de madera de roble y creando un estilo elegante y relajado. Su encimera de mármol Venato acompaña parte del mobiliario del salón y el comedor unificando el concepto y las texturas.
En el comedor se puede ver la mesa VOLÀ diseñada a medida para este espacio. Compuesta por dos bases de hierro en negro y con forma de cilindro prensado, soporta el sobre de mármol Venato con un acabado curvo en sus extremos. Las sillas azuladas de la firma Gubí y la lámpara con formas de arcos de la firma Phloc, encajan en armonía para generar un espacio fresco y agradable.
En la última estancia se encuentra la zona más social. Enmarcada por una alfombra de pelo largo y presidido por el mueble ARCO, encontramos el sofá y las butacas Pavilion AV5 que invitan en este espacio a la comunicación y conectando con la terraza a través de dos ventanales arqueados dispuestas en cada lado de la estancia.
Fotógrafo: Elton Rocha